De la misma forma que lo hace la imaginación, meditar también requiere alto grado de concentración, pero esto se puede aprender poco a poco.
Mi forma de meditar es dejarme llevar por las formas que se ven en los párpados cerrados y luego esas formas llevarlas a preguntas del ser. Conciliar el sueño de esta manera ayuda a conocer estados profundos de sí mismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario